A lo largo de los años, decenas de productos tecnológicos se han desarrollado con técnicas muy similares, y si bien en un inicio se utilizaban grandes cantidades de energía para funcionar, la tendencia es que se reduzca cada vez más tanto la energía necesaria para que se tenga un buen desempeño, como el tamaño de los productos.
Teniendo en cuenta esta necesidad, la llegada de celulares y tablets representó un reto para las empresas tecnológicas, al buscar una arquitectura que no requiriera tanta energía y que pudiera ser compacta, de ahí nació el resurgimiento de la arquitectura ARM.
No obstante, en los últimos años este tipo de arquitectura ha tenido un desarrollo exponencial de la mano de una de las empresas más famosas en el mundo y la más valiosa en el planeta: Apple, por lo que ahora, una tecnología que surgió en la década de los 80s, está más vigente que nunca y que, aunque ha tenido una especie de reingeniería para adecuarse a los tiempos actuales, está dando pelea contra la ya clásica arquitectura de 64 bits utilizada por años en las computadoras.
¿Qué es ARM?
Para definir qué es la arquitectura ARM y en qué se diferencia a las demás, tenemos que poner en contexto que todos los celulares, computadoras, tablets y hasta las televisiones inteligentes tienen un procesador, el cual se utiliza para realizar la mayor parte del trabajo de computación. El procesador recibe instrucciones, las ejecuta y entrega un resultado.
Ahora, en el caso de las computadoras, usualmente utilizan procesadores desarrollados ya sea por Intel, o por AMD y están diseñadas para tener un rendimiento en específico y pueden hacerlo debido a que cuentan con una fuente de energía potente, así como con procesadores específicos para los gráficos y un sistema de enfriamiento. No obstante, esto no ocurre en los celulares, puesto que, por su principio de ser pequeños y portables, las baterías y fuentes de energía tienen que ser más pequeñas.
Dicho esto, cabe destacar que nació una necesidad de tener algún protocolo o arquitectura que necesitara de menos energía para realizar los procesos informáticos, esto incluso, aunque significara perder un poco de potencia. Pues bueno, de esta necesidad se retomaron los procesadores con arquitectura ARM, que significa Advanced Risc Machine (Risc quiere decir Reduced Instruction Set Computer).
La arquitectura ARM fue diseñada por la empresa transnacional ARM Holdings, que tiene sede en Reino Unido y que está enfocada en el desarrollo de software y semiconductores, teniendo principal énfasis en los procesadores. Esta arquitectura se utilizaba desde la década de los 80s para ordenadores personales, aunque en los últimos años ha cobrado fuerza en la informática móvil.
Dentro de las especificaciones que la diferencian con los de arquitectura de 64 bits, es que los ARM aceptan sólo instrucciones que se puedan lograr en un solo ciclo de memoria, es decir, las que se usan para PC pueden realizar instrucciones más complicadas y largas, aunque esto implique un gasto mayor de energía.
La arquitectura ARM en el mercado actual
Como ya se mencionó, la arquitectura ARM está especialmente siendo utilizada en dispositivos portátiles, por lo que, en el caso de empresas como Qualcomm y sus famosos procesadores Snapdragon, así como Mediatek y sus chipsets Dimensity utilizan dicha arquitectura. Con este dato, podemos imaginarnos que prácticamente todos los celulares Android utilizan este esquema para trabajar y agilizar sus procesos.
Ahora también hay que destacar que las empresas mencionadas tienen que pagar una especie de regalía a la empresa ARM Holdings, pero las firmas pueden utilizar la arquitectura para diseñar sus propios procesadores a como les plazca.
No obstante, la arquitectura de este esquema no sólo está tomando fuerza en el mercado móvil, sino que, apenas el año pasado Apple anunció su primer procesador 100 por ciento diseñado y creado por ellos y sorprendió a propios y extraños cuando anunció que estaría basado en la arquitectura ARM.
De igual forma, la empresa de la manzana afirmó que pudo desarrollar este chip gracias a que contaba con más de una década de experiencia en el diseño de procesadores para sus dispositivos móviles y también catalogaron el lanzamiento como “el comienzo de una era completamente nueva para el Mac”.
Esta declaración fue también acompañada con los lanzamientos de este año hechos por los de Cupertino, pues en el pasado Apple Event realizado en octubre presentaron los procesadores M1 Pro y M1 Max, mediante los cuales aseguran, son los más potentes de la historia de Apple y de acuerdo con la empresa, los procesadores de la competencia de 8 núcleos tienen un rendimiento 70 por ciento menor, que se desploma aún más en los casos de los chipsets de Intel y AMD de cuatro núcleos.